Capitulo 397: Encuentro con las estrellas

 El día en que Egostic advirtió que se produciría la declaración de ruina del dios.

La Asociación de Héroes de Corea del Sur estuvo en alerta de emergencia durante todo el día.

"...Ya estoy harto y cansado de esto".

En el centro de control de la Asociación de Héroes, donde solo se reunieron unos pocos elegidos, el jefe de la asociación sentado en el medio suspiró esas palabras.

Y detrás de él estaban los ayudantes más cercanos del jefe, el héroe de rango A Shadow Walker, y...

“…”

Por supuesto, el único héroe de rango S actual en Corea del Sur.

Stardus se quedó allí con una expresión severa.

Y así, junto a los monitores que mostraban escenas de ciudades de Corea del Sur a través de CCTV, el jefe suspiró repetidamente.

"Ah… ¿qué es todo esto en mi vejez? En lugar de disfrutar de mi longevidad como cabeza, mi cabello se cae cada día más…"

[Calvo. Egostic dijo que comenzaría pronto, así que ¿podrías guardar silencio?]

"Mira este. Incluso me está regañando una niña lo suficientemente joven como para ser mi nieta ahora. ¡Oh dios! Deberías morir cuando seas viejo"

[…]

Ante esas palabras, Iselle en el monitor al lado de la cabeza se quedó en silencio como si estuviera asombrada.

Como tuvo que coordinar la respuesta a nivel nacional después de la profecía apocalíptica como presidente, participó de forma remota desde su oficina en lugar de desde la torre de control.

De todos modos, mientras el director e Iselle charlaban...

Apoyado contra la pared detrás de ellos, Stardus estaba sola, silenciosamente perdida en sus pensamientos.

'...Es lo que Egostic advirtió que vendría pronto.'

El presagio de Dios que sería el clímax final.

…Dios, eh.

"No… el dios del sol… Pero el sol significa de día… Odio el día…"

Al escuchar a Shadow Walker murmurar tristemente para sí mismo a su lado, Stardus se preparó silenciosamente para lo que estaba por venir.

Y luego.

[Saludos, humanos.]

De repente, sin previo aviso.

La voz de Dios rugió con fuerza en sus mentes.

"Hmm…!"

"Guh..."

"Oh…"

Además de eso, una por una, las personas de la asociación se agarraron la cabeza dolorosamente.

[¡Ay!]

[Urgh…]

Al mismo tiempo, las pantallas de la torre de control mostraban a ciudadanos de todo el país desplomándose mientras se agarraban la cabeza.

Por supuesto.

"..."

Por alguna razón, apenas tuvo efecto en Stardus.

Aparte de un ligero cosquilleo en la cabeza, extrañamente, ella fue la única que no se vio significativamente afectada.

De hecho, sin que ella lo supiera, con sus poderes estelares casi completos, apenas se vio afectada por la influencia del sol.

[Owww… Egostic no dijo nada sobre esto…]

"Hmm... ¿Eso es todo?"

Ah, mientras Iselle en la pantalla ya había echado espuma por la boca y colapsó, Shadow Walker y algunos otros estaban aguantando relativamente bien.

Aún así, mientras todos se retorcían de dolor... Stardus escuchó seriamente mientras el tipo que se hacía llamar dios hablaba.

[En mi ausencia… Han crecido… Terriblemente.]

Y como era de esperar, sus palabras fueron las mismas que la advertencia previa de Egostic.

Que él era dios y que destruiría este mundo en aproximadamente medio año.

Entonces, en lo que parecieron horas para los oyentes...

[…La muerte es todo lo que los humanos merecen.]

Concluyó su profecía.

"Ja ja."

Luego vinieron los sonidos de recuperar el aliento por todos lados.

…Aunque ya conocían el contenido aquí, escucharlo directamente todavía les causó una tremenda conmoción.

La intimidación y el poder abrumador mostrado por este llamado Dios Sol… hicieron imposible no reconocerlo como el verdadero.

"Uf… Mi cabeza"

"Ay… ya veo. Sabía lo que iba a decir, pero escucharlo directamente así… Esto es verdadero horror"

"Ughhhhh… Dímelo. Es como si fuéramos hormigas frente a un humano"

A medida que la gente de la asociación se recomponía gradualmente...

Stardus, con expresión severa, los despertó de su estupor y abrió la boca.

"Ahora. No tenemos tiempo. Primero declarar el estado de emergencia y…"

Fue cuando.

"Hmmm…"

En ese momento, Stardus se tambaleó mientras su cabeza resonaba, agarrando la pared con su mano.

"¿…? Stardus, ¿estás bien?"

"…No es nada. Sólo un breve mareo... Ah."

Mientras Stardus luchaba por responder...

De repente, su cabeza volvió a sonar.

Y después de esa última vez.

Tambalear-

"¡Stardus, Stardus! ¡Espera un segundo…!"

Con la voz nerviosa del jefe de la asociación desvaneciéndose en la distancia, su último recuerdo.

Como si estuviera siendo succionada en alguna parte, ella perdió el conocimiento.

∆∆∆

Y así volvemos al presente.

Destello.

Stardus abrió los ojos en un espacio desconocido.

"…Hmm. ¿Donde es esto?"

Mientras ella se levantaba con el ceño fruncido.

Lo que vio fue...

"…¿Eh?"

Una extensión interminable de espacio en blanco vacío.

Con el suelo y el cielo todos blancos, Stardus abrió mucho los ojos para comprender la situación.

"…Oh."

Notó que una mujer se acercaba a ella desde un lado.

Justo cuando intentaba ver bien quién era, una hermosa y melódica voz salió de la mujer que estaba delante.

NT: El dios de la estrella es La diosa de la estrella?  ( ͡° ͜ʖ ͡°)

"…Hola. Mi niña"

Con un brillante cabello dorado balanceándose detrás de ella como la propia Stardus, vestida con una túnica blanca ondeante al estilo griego antiguo.

Sostenía una fina tela parecida a un chal envuelta sobre sus hombros y pecho, emitiendo un aura místicamente hermosa como una obra de arte...

Sin embargo, al mismo tiempo, parecía frágil y debil, como si pudiera romperse en cualquier momento.

"…¿Quién eres?"

Al ver su apariencia, Stardus habló con cautela.

Aunque claramente era su primer encuentro, la mujer mística que tenía delante se sentía familiar, como si se hubieran visto muchas veces antes.

La mujer sonrió gentilmente a la cautelosa Stardus.

Pronto, con una sonrisa compasiva, abrió la boca con una voz cálida.

"…Yo soy quien te concedió tu poder. Una vez fui conocida como la Diosa Estelar".

"…¿Diosa?"

"Sí. Hija mía, Haru… será una larga historia"

Para Stardus, todavía sin entender la situación.

La autoproclamada Diosa Estelar sonrió de nuevo, luego, con un movimiento de su mano, creó una silla y un banco blancos frente a ella.

"Ahora. Sientate. …Te explicaré todo lo que deseas saber"

Con esas cálidas palabras...

– No te preocupes por la realidad. El tiempo aquí fluye de otra manera.

Escuchando la incorporación de la Diosa Estelar...

…Aunque no estaba completamente segura de dónde estaba esto o qué estaba pasando, por alguna razón Stardus no pudo rechazar las palabras de esta mujer de cabello dorado.

…Y su intuición le gritó que esta mujer era digna de confianza.

Además de una calidez inexplicable que sentía...

Inconscientemente, como si estuviera en trance, Stardus se sentó.

Luego, la Diosa Estelar se sentó frente a ella en la mesa redonda que ella creó.

Más hermosa que cualquier mujer que Stardus hubiera visto, pero con un extraño parecido consigo misma, Stardus evitó tímidamente su mirada.

Al darse cuenta de esto, la Diosa le sonrió amablemente a Stardus, luego con otro gesto produjo bebidas en la mesa.

"Ohoho. Tómate un poco y relájate mientras escuchas"

"…Ah, sí. ¿Gracias…?"

Sintiéndose extrañamente tímida, Stardus tomó con cuidado un sorbo de jugo de mango en el vaso que tenía delante.

…Jugo de mango.

El favorito de ella.

'…Dulce.'

Mientras el refrescante sabor llenaba su boca...

Stardus, que se había sentido algo aturdida, pudo aclarar un poco su cabeza.

Mientras tanto…

La Diosa Estelar le sonrió afectuosamente y luego comenzó a hablar.

"Ahora… comencemos desde el principio. Una vez más, soy la Diosa Estelar, una de los tres dioses que alguna vez existieron en este mundo. Mi nombre es Sīsdus".

"¿Sīsdus…?"

"Sí. Ese es el nombre que recordaste vagamente de nuestro primer encuentro, el cual usaste como tu nombre de héroe. Aunque lo modificaste un poco".

Con una sonrisa juguetona, la Diosa Estelar vio la expresión confusa de Stardus y asintió, continuando su historia.

"Sí. Este no es nuestro primer encuentro. Cuando eras joven… el día que perdiste a tus padres, vine a buscarte. Y luego. Te elegí, Haru, y te concedí lo último de mi poder...Haru."

Con esas palabras.

La Diosa Estelar Sīsdus le dijo en voz baja a Stardus.

"Tú eres al que elegí. La única salvadora capaz de impedir que el Dios Sol destruya este mundo"

"…¿Qué?"

Al ver la sorpresa de Stardus con los ojos muy abiertos, La Diosa Estelar sonrió gentilmente y dijo:

"Ahora te contaré todos los secretos. Escucha bien…"

Y entonces, comenzó la larga historia de la Diosa Estelar.